Zoe se cuida a sí misma y hace mucho tiempo que ha aceptado que si algo malo va a pasar, le iba a pasar a ella. Así que cuando ella pierde su trabajo por algo por lo que la mayoría de los jefes probablemente serían felices y su vida comienza a ir cuesta abajo desde allí, ella no espera que sea para mejor. Ella ciertamente no espera ninguna ayuda del idiota ruidoso de la puerta del lado, pero, de nuevo, ella no tiene nada que perder así que pone su confianza en él y espera lo mejor. Lo que no esperaba era que la única oportunidad en la vida que él le ofrece es a través de una arreglo en el que ambos se benefician y se supone que nadie debe salir herido, pero ella debería haberlo sabido mejor, porque su suerte nunca ha sido tan buena.
Como la mayoría de los Bradfords, Trevor tiene una debilidad por la comida, pero eso es todo. Lleva una vida muy sencilla y le gusta mantener las cosas simples, incluyendo sus relaciones. Él quiere a la mujer perfecta y sabe exactamente como es ella. Así que cuando él descubre, muy a su horror, que está pensando en su pequeña vecina desaliñada decide que la mejor manera de mantener cabeza recta es sacarla fuera de su sistema. Él va a mantenerla a su alrededor, pero sólo hasta que encuentre a la perfección.
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