El destino no siempre ha sido amigo de Isabelle West. De hecho, el destino ha sido una perra, francamente.
Isabelle ha aprendido por las malas lo difícil que la vida puede ser cuando el destino no está a tu lado. Te puede entregar tus sueños en bandejas de plata, pero te los puede arrebatar de vuelta y darte pesadillas. Una cosa que Isabelle sabía con certeza es que el destino era consistente cuando le fue quitando todo lo que ella amaba.
Durante los últimos dos años, Isabelle ha estado limpiando, poco a poco, las nubes de su pasado. La felicidad está, finalmente, en el horizonte. Ella tiene un negocio próspero, grandes amigos, y su vida, de nuevo. Todo lo que tiene que hacer es saltar sobre el último obstáculo ... su ex-marido.
Cuando los problemas empiezan provocando que ella tema por su nueva vida, y los recuerdos que es mejor dejarlos olvidados salen a la superficie, lo último que necesita es que un fantasma de su pasado venga a llamar a su puerta.
Axel nunca pensó que iba a mirar a los ojos de Isabelle West de nuevo, y él no estaba seguro de querer hacerlo ahora. Él cargó con su ira por tanto tiempo, que no está seguro de que pueda apagarlo, pero cuando se enfrenta a la protección de ella y a un inesperado deseo de tenerla de nuevo, la vida se vuelve un poco más complicada.
¿Cómo van Axel e Isabelle a lidiar cuando todas las cartas se ponen sobre la mesa y todo lo que pensaban que era verdadero les explote en la cara?
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