Con una madre ex supermodelo y un padre leyenda del rock -and- roll, Emma Preston tiene lo mejor de todo. Sin embargo, nada es tan perfecto como parece. Después del divorcio de sus padres, se ve obligada a vivir con su madre en una comunidad privada en Santa Mónica. Haciendo caso omiso a sus funciones paternales, su madre se centra más en ascender en la escala social, mientras que su padre está de gira.
Creciendo en un parque de casas rodantes con su madre, Jesse trabaja para las personas que buscan bajar sobre él . Cuando su madre le pide que presente una solicitud para una beca en una de las mejores escuelas privadas de Santa Mónica, nunca espera realmente conseguirlo. Cuando lo hace, se ve obligado a asistir a la escuela con un grupo de niños ricos. Ignora sus miradas mientras lo juzgan por tener tatuajes y un coche menos que impresionante. Mientras que siempre tenga su tabla de surf y los chicos de la tienda de tatuajes, él sabe que puede hacerlo a través de esto.
Cuando Jesse aparece en el primer día de escuela, Emma no puede evitar sentirse intrigada. Su madre nunca aprobaría que Emma hablara con alguien tan pobre, pero a ella no le importa, porque algo sobre Jesse la atrae hacia él.
Jesse trata de odiar a Emma, pero descubre que no puede resistirse a ella. Obligados a ocultar su relación de la madre y todos los demás alrededor de Emma, las cosas empiezan a desmoronarse. Cuando la amiga de Jesse, Ally, decide intervenir, las cosas van de mal en peor.
¿Pueden sobrevivir a su primer amor? ¿O se quedarán con nada más que los lazos rotos?
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